Sin duda alguna, los circuitos son una forma efectiva de estructurar parte de los entrenamientos en fútbol, además se puede utilizar en equipos profesionales y en equipos de base. Si a un circuito meramente físico le añadimos un elemento táctico-técnico, se convierte en una tarea mucho más completa y que no lo descontextualiza del fútbol, aumentando su valor como ejercicio.
El aspecto psicológico de sacrificio que lleva implícito la acción táctica que se realiza sobre un oponente con la intención de la recuperación de la posesión del balón es elevada. Y a veces, cuesta mucho que los jugadores tengan constancia de esa importancia. La presión bien realizada no da opción a nuestro oponente a mantener el control del juego.
Hoy se plantea un ejercicio para premiar el ataque por la zona que se requiera. Es importante barajar las alternativas por los distintos carriles de ataque pero siempre teniendo en cuenta cuál es la que se tiene definida en el modelo de juego. Por eso se premia de forma especial el conseguir goles de ese modo.
En un partido, para recuperar la posesión del balón debemos recurrir a acosar al adversario total o parcialmente dependiendo de las circunstancias. Para que esta acción sea beneficiosa a favor nuestra, debemos tener en cuenta varios aspectos como son el técnico, táctico, físico y mental. Para realizar esta acción de forma adecuada, cada jugador debe asumir una responsabilidad que en muchos casos se pierde. Para tomar constancia de responsabilidad y mejorar en la recuperación del balón, se propone este ejercicio con marcaje individual.
Siempre es importante manejar un cambio rápido de estado mental tanto en la fase ofensiva como en la defensiva y saber qué debemos realizar en cada uno de esos momentos de incertidumbre del juego. En esta tarea se incluye además una elemento de decisión muy importante para seleccionar la mejor zona de ataque.
Foto: es.globomedia.com
Desde el inicio de La Libreta del Mister siempre se ha hecho mucho hincapié en la circulación de balón en la zona de creación. Es lo que te permite poder generar espacios que aprovechar luego mediante un ataque vertical. Aquí puedes disponer de un ejercicio para fomentar la circulación de un carril al otro del campo. Se trata de una tarea integrada y que no tiene referencias de porterías, por lo que deberá usarse como paso previo a una tarea estructurada.
Tener un concepto básico claro en el fútbol como es crear línea de pase a un compañero puede ayudar a avanzar a un equipo en busca de su objetivo de mejorar día a día. Con esta tarea tan sencilla se puede crear un hábito al jugador desde pequeño a tener movilidad constante y a jugar con las líneas de pase para recibir en ventaja el balón. Puedes usar la tarea en la parte principal en edades tempranas reduciendo los tiempos (la repetición a 30″) o con adultos como parte final de un calentamiento o principio de la parte principal.
Los ejercicios de posesión en los entrenamientos de fútbol son muy habituales. Pero se pueden llevar un poco más allá incluyendo acciones de finalización para completar aún más la tarea. El exceso de ejercicios sin objetivos donde finalizar, a la larga, pueden llevar a que el fútbolista no sea capaz de progresar en el campo buscando el objetivo fundamental que es hacer gol.
